No pises el cotorro que no te puedo ver. No ves que hasta vergüenza me da ser tu mujer. Yo quiero, pa' que sepas tener siempre a mi lado a un hombre bien templado, no a un maula como vos. A un hombre que se juegue, si llega la ocasión, la vida en una carta, sin sentir emoción. A un hombre que sea hombre y sepa responder y no llore cobarde, igual que una mujer.
Maula que ante el insulto callaste. Maula que cobarde te achicaste. Maula que sólo te creés valiente cuando una noche de farra te ves enfrente de una mujer.
La barra del boliche borracha de pernod mi nombre que es el tuyo por el suelo arrastró y vos que de una mesa oíste aquella infamia bajaste la cabeza, cobarde, sin chistar. Al verte tan compadre, con tu aire de matón, te juro por mi madre te tengo compasión. No vuelvas al cotorro, porque mi corazón, se ha hecho para un hombre y vos no sos varón.