He probado la dulzura de la miel Y he calentado mi cuerpo al abrigo de una hoguera He conocido la grandeza de el mar Pero nada contigo se puede comparar Ni la suave caricia del viento Ni la ternura de un bebé Ni la verdad de un sentimiento Buen dios que tu me ha dado mas placer Porque, porque Porque porque...
No hay nada más dulce que tus ojos Ni nada más cierto que tu ser Ni nada más grande que tu corazón Al momento que hablamos tu y yo No hay nada más suave que tus manos Nada más hermoso que tu piel Nada más verdadero que los sueños Que despierto inventamos tu y yo.
He sentido el abrazo de la fé Y he vivido el arrullo misterioso de los sueños El perfume excitante del jazmín Pero nada contigo podría competir Porque, porque Porque porque...
No hay nada más dulce que tus ojos Ni nada más cierto que tu ser Ni nada más grande que tu corazón Al momento que hablamos tu y yo No hay nada más suave que tus manos Nada más hermoso que tu piel Nada más verdadero que los sueños Que despierto inventamos tu y yo.