Soy el pasado , el presente, soy la timida arrogancia, el cansancio de los sueños, lo oscuro de la mañana.
El mas dulce de los venenos, lo más sabio de la ignorancia, la avaricia desprendida, cercania en la distancia.
El cuidado mas dejado, sutileza y crudeza a la vez, hermetismo en la apertura, escased en la abundancia.
Soy la caricia encendida, y el reproche entre las mantas. Soy el blanco de tus ojos, soy el negro de tu alma.
Tantas lunas compartiendo, tantas noches desgastadas, tantas risas, tantos llantos, hoy hola y adios mañana recio brazo que no tiembla, mano izquierda que acompaña, la bondad mal entendida, la llama siempre apagada.
Soy el alivio que duele, la doctrina reprochada, factor que altera el producto, extintor que aviva el ascua.
El temor de los valientes, soledad compañada, el alumno, que, aunque aprende, descoloca la ensañanza.
El guion improvisado, el que anda y nunca avanza, atento en la distraccion, alegria desangelada.
Soy el calor de la helada. Y el enfado en la carcajada. Soy oasis yermo y seco. Soy tu reflejo. Soy nada.