¡lloras! Si es que estás arrepentida No se juega con la vida, Ni se mata una ilusión. ¡lloras! Que en cien noches de quebranto Aprendí a llorate tanto, Que está muerto el corazón,
Vienes, por la angustia retratada, Con el alma destrozada, Para hablarme de tu amor, Sabes, cabecita descocada, Que sin ti ya no soy nada, Y aquí tienes mi perdón. Sabes, cabecita descocada, Que sin ti ya no soy nada, Y aquí tienes mi perdón.
¡lloras! Si es que estás arrepentida Por la sal por ti vertida, Que me llena de dolor. ¡lloras! Que en cien noches de quebranto Aprendí a llorate tanto, Que está muerto el corazón.