No es casualidad que yo te ame, cuando veo todo lo que has hecho, no solo en Tu creacion, sino en mi corazon que sin saber porqué ya no es de piedra. No es casualidad que yo te ame porque de Tu voz emana vida capaz de transformar un pobre corazón en una vida llena de alegria. Tu voz, creo la luz que aún hoy podemos contemplar Tu voz creó las nubes bajo el cielo y sobre el mar. Oh, habla otra vez, voz de Jehová, repite en mi el milagro, y que te pueda escuchar, desata el poderio, de Tu voz una vez más, rugido de león de la tribu de Judá.
Eres invensible en la batalla eres com el sol de la mañana. Tan fuerte y tan real, que no tienes igual, y tiembla el enemigo a tu mirada. Eres a la vez tan fiel y tierno que una niña puede acariciarte, que aparte de luchar, tambien sabes jugar, como un cachorro puro e inocente.
Te amo, porque cuando estás conmigo soy feliz, y no es casualidad que quiera estar cerca de Ti. Oh, habla otra vez, y que te pueda oir, repite en mi el milagro, y que te pueda escuchar, desata el poderio de tu voz una vez más, rugido de león, rugido de león, de la tribu de Judá.
Compositor: Marcos Vidal Roloff (Marcos Vidal) ECAD: Obra #21034148