Una extraña noche el eco de su voz, surgió del frío en un buen lugar. Sus ojos traen el fuego que la sangre no apagó y bajo la tormenta se habló: “De una triste historia de venganzas y de honor, que el tiempo no logró olvidar. Siete calaveras y una maldición, siete cruces bajo el sol”.
Una por rencor, dos por ambición, tres por el dinero que voló. Cuatro por el odio, cinco por error, seis por el amor que no llegó.
Siete calaveras y una maldición, que el tiempo no logró olvidar. Una triste historia de venganzas y de honor, siete cruces bajo el sol.
Siete calaveras duermen en el valle, siete calaveras y una maldición. Siete calaveras duermen en el valle, siete calaveras y una maldición, maldición.
“Hey hermano, tú tienes más que yo”, la envidia fue su perdición. Sonaron seis disparos y un cuchillo atravesó al último que quedó.
Una triste historia de venganzas y de honor, que el tiempo no logró olvidar. Siete calaveras y una maldición, siete cruces bajo el sol.
Siete calaveras duermen en el valle, siete calaveras y una maldición. Siete calaveras duermen en el valle, siete calaveras buscan el perdón. Siete calaveras duermen en el valle, siete calaveras y una maldición. Siete calaveras duermen en el valle, siete calaveras buscan el perdón, el perdón.